Con un volumen de ventas de autos estabilizado en un nivel alto, la Argentina actual puede mostrar logros impensados años atrás. Por ejemplo, compararse con la realidad europea y salir airosa.
Si por una licencia geográfica el país no estuviera en Sudamérica sino en el Viejo Continente, ocuparía el quinto puesto en patentamientos de 0 km, según los datos del primer trimestre del año. Un registro nada despreciable si tenemos en cuenta que la lista la integran más de veinticinco naciones.
Sólo Alemania, el Reino Unido, Francia e Italia pueden mostrar una performance superior. La gran desplazada es España, un país que llegó a vender más de 1,6 millón de unidades anuales antes de la crisis y que en 2012 se derrumbó a unas 700.000 unidades, afectada por una de sus peores crisis.
Entre enero y marzo, según datos de ACARA, se registraron en la Argentina 247.804 vehículos. Si bien es un 2% menos que en igual período de 2012, la baja no es significativa si se tiene en cuenta que estamos hablando de los niveles más altos de demanda de la historia. En España, en los tres primeros meses se vendieron apenas 180.000 autos.
En la Argentina se espera este año un mercado de más de 800.000 unidades, como viene sucediendo desde hace tres años.
La demanda para la compra de autos se sostiene en gran parte porque, ante la falta de inversiones seguras, las dificultades para ahorrar en dólares y la alta inflación, el público se vuelca al consumo, y una franja de la sociedad elige los 0 km como alternativa. Además, si se tiene en cuenta que los autos se venden en pesos al cambio oficial, quienes tienen dólares ahorrados pueden hacer un gran negocio ya que vendiéndolos en el mercado ilegal pagan un 40% menos (en dólares) por un vehículo. Esto se percibe más en el segmento de alta gama.
Por ejemplo, en marzo, mientras el mercado en general tuvo una leve desaceleración, en los autos premium se registró una suba del 20% en promedio. Es que los precios de esos coches, medidos en dólares «blue» se encuentran más baratos que en los principales mercados internacionales.
Audi, que es la líder del mercado local, tuvo una suba del 3%, pero Mercedes-Benz creció el 26% y BMW superó el 73% respecto de igual mes de 2012.
En Europa sucede algo parecido, pero no por efecto del «blue», sino por el fuerte ajuste. Mientras las ventas de 0 km globales retroceden, la demanda de las marcas premium se sostiene o hasta crece. Esto se debe a que los sectores de mayor poder adquisitivo enfrentan mejor las consecuencias de la grave crisis.
Fuente: Ambito
http://www.ambito.com/diario/noticia.asp?id=685053