En provincias como Chaco, La Pampa, Formosa o Córdoba es común ver por las calles ciclomotores o motos pequeñas que con sus ruidos son capaces de terminar con la siesta de cualquier vecino.
Como informa el diario Clarín, esta moda se debe a las facilidades que existen para adquirir este tipo de vehículos ya que en el interior del país se venden a bajos precios y hasta se pueden conseguir créditos para adquirirlas con sólo presentar el DNI.
Pero esta moda vino de la mano de una falta total de controles ya que se pueden ver por las calles familias enteras viajando en una moto y, en muchos casos, sin los cascos correspondientes.
Muchos de los que decidieron comprar un ciclomotor o una moto pequeña de no más de 125 centímetros cúbicos aseguran que no quisieron un auto porque les resulta caro y a la vez incómodo.
«Es la combinación perfecta entre precio y comodidad. Es práctica para el traslado y sale lo mismo que un televisor. Muchos clientes me dicen que tienen plata para comprar un Fiat 600 o una moto de este tipo y se terminan inclinando por la segunda opción», aseguró Leonardo Cabrera, el encargado de una agencia de motos en Rosario.
Las cifras que maneja la industria muestran el incremento en las ventas de este tipo de vehículos, con un incremento de 28,5 veces entre 2003 y 2008, pasando de 26 mil unidades patentadas a 742 mil.
De estas cifras, la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara) asegura que un 80% de los modelos vendidos son las motos de bajo costo conocidas como “cubs” por tener entre 100 y 125 centímetros cúbicos.
