El seleccionado masculino de voleibol terminó cuarta, en su mejor campaña en el torneo; el bronce fue para Polonia, que ganó 3-0; Rusia se quedó con el título

La imagen del final no alcanzó para torcer el excelente trabajo que cumplió el seleccionado argentino de voleibol en la Liga Mundial. El equipo dirigido por Javier Weber, que se fue de esta ciudad sin la medalla de bronce que sin dudas habría merecido para coronar una histórica campaña, perdió ante los locales por 3 a 0 (25-18, 25-23 y 25-22) y se quedó, finalmente, con el cuarto lugar. Así, la Argentina consiguió su mejor posición en una Liga Mundial, con un equipo joven y de gran futuro, que a lo largo del torneo logró doblegar a potencias como Suecia e Italia, protagonizar actuaciones de muy alto nivel, como ante Bulgaria (3-0), y clasificarse holgadamente para las semifinales.

Lamentablemente, la Argentina jugó ayer su partido más flojo de los cinco que disputó en la serie final, y de ello dio cuenta el receptor punta Rodrigo Quiroga. El sanjuanino lamentó «no poder estar en el podio», pero resaltó: «Para nosotros el cuarto puesto es un gran logro». Lo que no hace sino reforzar el gran estímulo del equipo, que hasta el último día tuvo objetivos bien altos y dejó abierto un crédito enorme.

En la final, Rusia venció a Brasil por 3-2 (23-25, 27-25, 25-23, 22-25 y 15-11).

Fuente: canchallena.com

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