23 mayo 2010

La Argentina se sube al tren de la biotecnología con boleto propio

La biotecnología no es novedad en el país. Existen muchos desarrollos, pero la ley que los impulsa no fue reglamentada

PorCarlos Boyadjián
ESPECIAL PARA CLARIN
..
Terneros clonados, biodiésel, “superleche” para prevenir diabetes y formación de células tumorales, proteínas recombinantes, soja resistente a herbicidas, semillas protegidas contra la sequía y la salinidad de los suelos, son sólo algunos de los logros de científicos argentinos en los últimos años.

La biotecnología, de eso se trata, podría ser uno de los ejes de la nueva economía, junto a la nanotecnología, la informática y las energías basadas en recursos naturales. Lo relevante es que, a diferencia de los tiempos en que la Argentina llegaba tarde, o nunca, al tren tecnológico de la época, esta vez está bien posicionada y sobre bases sólidas.

“La Argentina fue el primer país de América latina en comenzar con la biotecnología en los años 80, y hoy es una oportunidad, más que nada en la producción de alimentos”, asegura Juan Dellacha, director científico del Foro Argentino de Biotecnología.

Alberto D’Andrea, director de la licenciatura en Biotecnología de la UADE, coincide. “Tenemos buena extensión de tierra, materia prima renovable, biomasa, pero también conocimientos y miles de oportunidades de exportar biotecnología”. Y recuerda que hoy “un 40% de los productos farmacéuticos son de origen biotecnológico, como la insulina, que es el producto más vendido”. En esta lista también habría que poner la vacuna contra la hepatitis B, la eritropoyetina o los anticuerpos monoclonales. El ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, afirmó que “un kilo de eritropoyetina tiene un valor similar a 200 kilómetros de camiones cargados de soja”.

Cada vez somos más

Hay más de 120 empresas biotecnológicas en el país, la gran mayoría pymes surgidas a partir de una investigación con potencial (o una patente) a la que suma luego algún inversor. Uno de los logros más recientes fue de la rosarina Bioceres, a fines de 2009, que junto a la Universidad del Litoral y el Conicet, desarrolló semillas resistentes a la sequía y la salinidad que ya exporta a la India.

El director de Desarrollo de Negocios de Laboratorio Elea, Federico Santoro, reseña que tienen en curso dos investigaciones biotecnológicas sobre cáncer de mama. “Si se avanza con la aprobación de esta fase, en 4 o 5 años podríamos estar poniendo el producto en el mercado”, se entusiasma.

En el proyecto intervienen también universidades y hospitales públicos y tiene el apoyo del Ministerio de Ciencia y Tecnología. Hasta ahora la inversión fue de US$ 50 millones.

Pero no sólo de medicamentos vive el hombre. “Si este año vamos a tener una cosecha de soja de 57 millones de toneladas es por la biotecnología”, apunta D’Andrea. Esto sin olvidar el nuevo negocio que surgió en el país a partir de los biocombustibles. En algo más de una década la Argentina triplicó la cosecha, gracias a la soja transgénica y otros cultivos como el maíz y el algodón.

Desde la División Semillas de Syngenta, Juan Kiekebusch, considera que “la biotecnología es ya una herramienta imprescindible en el desarrollo de nuevas variedades, tanto para acelerar los procesos de fitomejoramiento como para incorporar transgenes de interés agronómico o de calidad del producto final”.

En cuanto a las líneas de investigación, Kiekebusch destaca que “Syngenta se está focalizando en lograr tolerancias a plagas de insectos y a distintos herbicidas para maíz y soja”, también en el control de “las plagas de lepidópteros, que son importantes en Argentina”.

Capital de riesgo

“Una cosa es el impulso privado que se está haciendo en biotecnología, porque se han dado las condiciones económicas, pero el desarrollo de la biotecnología debe ser una política de Estado, y acá todavía no está planteada así”, reconoce Dellacha.

En ese sentido, recuerda que no hay un mercado de capitales que favorezca esta industria como pasa en Estados Unidos y “los bancos no tienen expertos en biotecnología para evaluar proyectos”, dice. No obstante, rescata que el Ministerio de Ciencia y Tecnología “esté detrás de un fondo de capital de riesgo para startups”. En 2007 se sancionó la Ley 26.270, que establece medidas de promoción para el desarrollo de la biotecnología, a través de beneficios fiscales y hasta créditos no reembolsables pero que aún no se reglamentó. Es el marco jurídico que reclama el sector.

http://www.ieco.clarin.com/economia/Argentina-tren-biotecnologia-boleto-propio_0_132900028.html

Categorizado | Investigación en argentina, Tecnología argentina

Deja una respuesta

NO se publicarán comentarios que contengan insultos o malas palabras

Estimados amigos:
Este sitio no recibe apoyo privado ni estatal. Preferimos que sea así para poder publicar lo que consideramos "buenas noticias" sobre nuestro país de manera independiente. Si te gusta este sitio y querés colaborar para que sigamos online escaneá el código QR con la App de Mercado Pago.
Gracias por leernos y por tu colaboración!!


Las Malvinas fueron, son y serán argentinas!

Humor


Sendra | Sendra


16.gif


DANIEL PAZ & RUDY | Página 12

Daniel Paz & Rudy