Roland Joffé recupera en el cine la figura de Josemaría Escrivá de Balaguer .El director de La misión filma aquí una historia de pasiones, en la que participa el fundador del Opus Dei
Trincheras armadas en Luján, frente a la catedral, donde hubo combates y explosiones durante una semana Foto:LA NACION / Mariana Araujo
Estación Atocha, año 1939. Soldados republicanos cantan, entre pertrechos, «A las barricadas». Esta última semana, la escena se repitió por TV una y otra vez. En realidad, se trata de la catedral de Luján y la estación Constitución, usadas como sets de la película There B e Dragons, que el director británico Roland Joffé viene rodando aquí desde junio. Durante todo un fin de semana, se pasearon por esas dos locaciones hombres y mujeres vestidos de milicianos con banderas rojas, tal como ocurrió hace más de 70 años, cuando fueron derrotados por las tropas al mando de Francisco Franco.
La película encuadra tres épocas diferentes. La de principios de este siglo, cuando Robert (interpretado por Dougray Scott), un periodista británico, sale en busca de información sobre Josemaría Escrivá de Balaguer (1902-1975), fundador del Opus Dei en 1928, en vísperas de su canonización. El sacerdote había sido amigo de su padre, ahora moribundo en España en los tiempos de la sangrienta Guerra Civil, de quien está distanciado. Con esa excusa, la historia viaja hasta la contienda cuando, a los 35 años, el futuro santo barbastrense escapó del conflicto entre quienes defendían la II República, principalmente socialistas, comunistas y anarquistas, y el ejército nacionalista, encabezado por Francisco Franco. La película mostrará este viaje a través de los Pirineos por Andorra, rumbo a Francia y, al mismo tiempo, la historia de una joven húngara que viaja a España para unirse al bando republicano.
El film tiene un presupuesto que ronda los 30 millones de dólares, reunidos por un centenar de inversionistas de Estados Unidos, España y la Argentina, algunos, los más importantes, pertenecientes al Opus Dei, entre los que se cuentan el californiano Heriberto Schoeffer y el abogado madrileño Ignacio Gómez-Sancha, ambos miembros de la Obra de Dios. «No se trata de una película del Opus, sino de una producción donde participan muchos inversores, algunos pertenecientes al Opus», aclaró el español.
Pasiones encontradas
Sus figuras internacionales son Charlie Cox (Josemaría), y Wes Bentley (su amigo Manolo, padre de Robert), que estuvieron en la rueda de prensa local, al igual que la ucraniana Olga Kurylenko, la última chica Bond; el brasileño Rodrigo Santoro, el citado Dougray Scott (Robert) y Unax Ugalde, Ana Torrent, Jordi Mollà, Geraldine Chaplin y Derek Jacobi (aquel de Yo, Claudio ). El grupo local incluye a Pablo Padula como el ingeniero español de origen argentino Isidoro Zorzano (cofundador del Opus), Lito Cruz y Boy Olmi.
El título del relato, una historia de pasiones, con traición, amor y religión, que incluye un extenso recorrido por la guerra, remite al Hic sunt dracones, que los cartógrafos de la Antigüedad usaban para referirse a territorios desconocidos en los que podrían morar criaturas mitológicas. Para la Iglesia medieval, los dragones eran símbolo de pecado y del paganismo en general. En la película de Joffé, la sentencia se convierte en un certero «Habrá dragones».
Más allá de que Joffé aparece como único autor del guión, el texto fue supervisado por la monja Bárbara Nicolosi, perteneciente al grupo Cristianos en Hollywood. Consultada por The New York Times , Nicolosi dijo que se trata de una «aventura a lo Indiana Jones acerca de un joven motivado por Jesús».
Joffé no fue el primero recibir la propuesta de ocupar la silla de director. La lista incluyó a Hugh Hudson, quien habría convocado a Colin Farrell para el papel de Escrivá, pero tras leer el guión habría argumentado que le parecía «demasiado franquista», y el mexicano Alejandro González Iñárritu, quien primero postuló a Diego Luna y después concluyó que el proyecto le parecía «demasiado… complejo». También fueron candidatos Willy Toledo y Juan Diego Botto.
Tras momentos de incertidumbre, el fondo de inversión habría salido en busca de un cineasta que pudiera resolver estas cuestiones entre ideológicas y de producción. El elegido fue el autor de películas como Los gritos del silencio , un relato crítico al régimen comunista de Pol Pot en Camboya, y La misión , acerca de un jesuita y un mercader que en el siglo XVIII se unen para luchar contra la esclavitud en la zona del Iguazú, mirada que muchos asociaron con la «teología de la liberación». De lo que no cabe duda es de que Joffé, que aquí cuenta con la dirección de arte del cordobés ganador de un Oscar Eugenio Zanetti, es un cineasta con buena mano, tanto para los despliegues como para el drama intenso.
Joffé aseguró que, en principio, se resistía al personaje de esta película, postura que cambió por completo cuando vio algunos de los videos con Escrivá y descubrió su amplitud.
«Creo en Dios, pero habrá que ver si Dios cree en mí», reconoció Joffé. «Soy un pequeño ser humano. Entiendo a la gente que cree en Dios todos los días de la semana. En mi caso, puedo creer el lunes y el martes estar un poco perdido. Una vez le pregunté a mi papá: «¿Vos creés en Dios?», y él me dijo: «Es una pregunta retórica? Una noche llena de estrellas puede ser en sí una prueba de su existencia o un signo de pregunta divina sobre nuestros valores». Josemaría decía que todos, a fin de cuentas, somos pecadores. No sé ustedes, pero yo, seguro», aseguró.
Según Joffé, no se trata de una respuesta a El código Da Vinci , a la que juzgó como «una buena película». Tampoco parece serlo a Camino , del español Javier Fesser acerca de la niña Alexia González-Barros, que murió, según el Opus, «en estado de santidad», film que ganó cuatro Goya y fue un éxito en su país, en 2008.
El hermetismo que existe sobre los contenidos del guión crea expectativas. Y como si ese silencio no fuese suficiente, la producción cuenta con los servicios de Paul Lauer, el publicista de La Pasión de Cristo , de Mel Gibson. Está escrito: habrá polémica.
Claudio D. Minghetti
Los números del film
13 semanas de rodaje aquí tuvo el film, más, tres adicionales en Madrid y el Vaticano
- 75 actores con diálogos componen el elenco, incluidos media docena de argentinos
- 100 son los inversores reunidos para la producción del film, provenientes de Estados Unidos, México y la Argentina
- 150 personas integran el equipo técnico detrás de las cámaras
- 400 son los extras que participaron en los rodajes en Villa de Mayo, Sierra de la Ventana, Luján, Avellaneda, los colegios Buenos Aires y San José, el barrio de San Telmo y la estación Constitución, que recreó la vieja Atocha.
- 12.000.000 de dólares, aproximadamente, se invirtieron en los rodajes en la Argentina, que reconstruyen escenarios españoles de fines de la década del 30.
- 30.000.000 de dólares costará la película, que aportará un fondo de inversión
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1168793&pid=7213678&toi=6297